Reshforce

[Mataformigues]

Este capítulo me ha encantado, no sé por qué; Ill y su casa y su jardín, y la agencia que cada vez se perfila más malvada (o Ele; no sé si actuará por su propia iniciativa). xD

[Caleb]

xD tiene que tener un poco de dejo a cómic jaja

Ya verán lo que se viene!

[JIG]

Da fuq! el viejo James Rogan, que será de su vida, y Meyers, una eminencia del trolleo en Resh.

Siguela y has más menciones al pasado añejo xD

[Ele Alzerav]

Cuánta oscuridad y cuántos secretos por destapar... eso sí, mientras destapamos iré con un ojo abierto por si acaso a Ill se le ocurre ir a por mi xDD

[Caleb]

Capítulo 5
Un nuevo equipo

Tras ocuparse de los reclutamientos, Ele se fue a distender un poco en una de las pequeñas salas de entrenamiento de Langley. Ill estaba reunido con Rain recibiendo instrucciones e información, mientras que los reclusos eran llevados esposados hasta un cuarto de interrogatorios.
Todo estaba en marcha. Seguían sin recibir noticias del Sanatorio Meyers, y eso inquietaba a los altos mandos.

Ele estaba dándole puñetazos a un saco de boxeo mientras recordaba detalles de Sudán. Cómo la situación se había ido a la mierda a las dos horas de iniciada la misión. Siempre pensó que hubo una filtración de información, y que Ill intentó eliminarla.
Sabía que el joven trabajaba como mercenario para diferentes organizaciones y empleadores, y aquella vez en Sudán se enfrentaban a un magnate que alguna vez había contratado a Ill.
Elena tuvo que sortear varias dificultades y ver caer a unos cuantos compañeros. Sus comunicaciones estaban interrumpidas, Ill y otros colegas se dispersaban sin obedecer órdenes... una serie de eventos que la llenaron de sospechas.

La sala de entrenamiento estaba vacía, sólo se escuchaban los golpes resonando por cada rincón. Ella no perdía la costumbre de ir allí bien temprano todos los días. A veces le servía para ordenar sus pensamientos.
A cada minuto que pasaba le pesaba cada vez más esa nueva misión. No tenía idea de a qué se enfrentarían pero Rain parecía asumir que habría fuerzas hostiles. Y sólo ella junto a dos rehenes tenían boleto de regreso...
Por momentos se cuestionaba los motivos de la misión. ¿Armar un equipo prescindible para tapar secretos del gobierno?

De pronto la puerta de la sala se abrió y entraron dos sujetos con trajes negros y gafas oscuras. Tenían un auricular en el oído derecho, y uno de ellos mascaba chicle.
-¿Agente Alzerav?-
Ele le dio un último puñetazo al saco de boxeo y dirigió su mirada a los tipos trajeados.
-¿Qué?-Les preguntó con fastidio.
-Arriba están listos.-Contestó el hombre de negro.
-Ah, gracias. En unos minutos estaré allí.-
-Muy bien.-
Los agentes se dieron media vuelta y salieron. Ele suspiró y se fue a uno de los vestidores a prepararse. Esos tipos eran del gobierno, pertenecían a un servicio secreto conocido entre los espías como “Total Fear”. Cada vez que los tenía cerca le daban escalofríos.

Una vez que se refrescó y estuvo lista, salió a los pasillos de Langley y fue con expectativas hacia los cuartos de interrogatorios. Por el camino se cruzó algunos empleados que comentaban en voz baja algo acerca de una “misión secreta”. Qué rápido corrían los rumores. A la gente en el fondo le encantaba eso. No querían saber de qué iba, sólo querían comentarlo y hablar de ello.
Muchas veces le habían dicho que ella se estaba forjando una leyenda. Tenía una buena carrera y un excelente servicio, y aquellos con mayor acceso a información secreta también sabían de su trabajo en Reshforce.
Algunas agencias de otros lugares del mundo ya empezaban a poner su nombre en listas de personas a tener en cuenta.
Cuando llegó a la zona de interrogatorios, unos hombres de negro le señalaron el camino. Ella sólo los saludó con una inclinación de la cabeza y pasó por su lado. Ellos también saludaron, pero seguían viéndose fríos e inexpresivos.

Ele abrió una puerta negra y se encontró en un cuarto con una mesa repleta de objetos, varios aparatos electrónicos en otros escritorios y una ventana a la derecha. Ill estaba apoyado contra una pared cruzado de brazos y mirando al otro lado del vidrio.
Para los sujetos cautivos del otro lado era un espejo, pero ellos los veían perfectamente. Los reclusos estaban despiertos, sentados y esposados a sus sillas.

Ella saludó a Ill y se ubicó frente al vidrio. Su colega se separó de la pared y se acercó unos pasos.
-¿Hablaste con ellos?-Preguntó Ele.
-Sí, un poco. Point y Jig quieren conocer los términos. Isra se hace el distraído y Sombra no ha dicho nada.-Contestó Ill.
-Bueno, vamos a ver cómo los convencemos.-
Ele caminó hasta los aparatos electrónicos y tomó el micrófono que había allí. Oprimió un botón y los altavoces del otro cuarto se encendieron.
-Reclutas. Les habla la Comandante Alzerav, a partir de este momento ustedes forman parte de Reshforce. Por sus servicios se les reducirá su pena en un 75%, y cobrarán treinta mil dólares por misión, netos. Si desean agregar nuevos términos, las negociaciones están abiertas.-Recitó Ele.

Se alejó del micrófono y miró al vidrio.
-¿Comandante Alzerav?-Preguntó Ill.
-No es un rango, me lo inventé porque quedaba bien.-Respondió Ele quitándole importancia. Ill se encogió de hombros.
Al otro lado de la ventana, algunos hicieron gestos afirmativos.
-¡A mí me parece bien! ¡Sólo exijo que se borren mis antecedentes de todo sistema!-Exclamó Fury.
-Yo también acuerdo.-Agregó Jig.
En cambio Isra y Sombra permanecieron en silencio.
Ill meneó la cabeza y se estrujó los nudillos.
-Esos dos van a ser los difíciles...-
-Espera, Ill.-Dijo Ele mientras se acercaba al micrófono.
Volvió a encender los altavoces.
-Muy bien, Fury. Cumpliremos nuestra parte.-

Desde el otro lado Fury sonrió e hizo gestos de aprobación. Parecía el más entusiasmado de los cuatro.
A continuación Ele se dirigió a Ill que parecía impaciente.
-Dile a los tipos de afuera que preparen dos salas. Tú te ocupas de Isra, yo de la chica.-Ordenó Ele.
-De acuerdo.-
-Pero sin golpes. Haz que coopere, evita apalearlo.-Indicó Ele y le lanzó una mirada fulminante.
-No te preocupes.-Contestó Ill, sosteniéndole la mirada.

Ambos salieron y mientras Ill hablaba con unos hombres de negro, Ele se dirigió a otros que resguardaban el final del pasillo.
-Agentes, necesito que se ocupen de algo.-
-Estamos a disposición.-Contestó uno de ellos.
-Mi compañero y yo vamos a llevarnos a dos reclusos por separado, quiero que ustedes agarren a los que queden en aquella sala y los lleven al cuarto de operaciones. Que se vayan preparando.-Dijo Elena.
-Entendido.-
Los hombres de negro hicieron un gesto afirmativo y se pusieron en movimiento. Ele se pasó una mano por el cabello y se giró.

Mientras volvía por el pasillo, uno de los agentes que estaba allí le indicó una puerta lateral. Ella ingresó y se encontró en un pequeño cuarto con dos sillas y una mesa. Se sentó y apoyó las manos sobre la superficie. Frente a ella estaba Sombra con las esposas colocadas, mirando hacia otro lado.
-¿Me vas a escuchar?-Preguntó Ele.
Pero no parecía que fuera a ser así. La recluta seguía en silencio y ni siquiera le dirigía la mirada.
-Según me dijeron en la prisión te dicen “Sombra”. Supongo que puedo llamarte así.-
No obtuvo respuesta, pero no le hacía perder la paciencia. Ya conocía ese tipo de comportamientos y no iba a tardar en quebrarla.
-Así que realizaste unos trabajitos muy interesantes para ciertos sujetos... no sé si lo harías por gusto, por ideales o por dinero, pero fueron muy buenos. Necesitamos a alguien así en Reshforce. Excepto, quizás...-Ele hizo una pausa y se echó hacia atrás en la silla-... por lo que pasó con tu hermana.-

Un gesto corporal de Sombra le indicó que acababa de captar su atención. Fue casi imperceptible, pero sabía lo que hacía.
-Raven, ¿verdad? ¿alias “Bellamy”? ¿el llavero de panda pertenece a ella?-Preguntó Ele.
Sombra giró su cabeza hasta detener su mirada en Ele. La estaba escudriñando, buscando alguna pista que delatara un truco o algo.
Pero Elena la observó en silencio sin dar el menor atisbo de nada.
-¿Es de ella?-Insistió Ele.
-Sí...-Contestó Sombra casi en un hilo de voz.
-Pues bien. ¿Crees que lo querrá de regreso?-
-... ¿qué?-Preguntó Sombra.

Elena se levantó y fue hacia la puerta. Sombra esposada intentó ponerse de pie sin éxito pero hizo su esfuerzo.
-¡Espera! ¡Regresa!-
No le hizo caso y salió igual.

Era parte del trabajito. Ele salió al pasillo donde había varios hombres de negro apostados, y al mirar hacia la derecha vio a Ill saliendo con Isra aún esposado. Sin embargo ambos reían.
Cuando unos agentes se llevaron a Isra, Ill se acercó a Ele meneando la cabeza.
-¿Ya está?-Preguntó Elena.
-Sí. Es un tipo extraño. Sólo hay que entender su juego. La verdad es que no tenía ningún motivo para no responder.-
-¿Ah, sí?-Ele alzó una ceja.
-Dijo que le daba pereza. Pero después de conversar un rato le parecieron bien los términos y aceptó cooperar. Dijo que si le gustaba iba a pedir un puesto a tiempo completo.-
-Sí, pero que primero cumpla su condena. En fin, felicitaciones.-
-Gracias. ¿Y tú cómo vienes?-
-Bien, ya logré que hable. Ahora le dejé algo picando, ya entraré a ver qué dice.-
-Claro. Bueno, yo iré a supervisar al equipo. Espero no te tardes mucho.-

Ill se alejó por el pasillo, y Ele se dirigió a uno de los hombres de negro para pedirle las llaves de las esposas de Sombra. En cuanto las recibió regresó al cuarto de interrogatorios. Sombra parecía estar más ansiosa.
-Disculpa, tuve que atender una cosa.-Dijo Elena mientras se sentaba nuevamente.
-¿Qué estabas diciendo de mi hermana?-Preguntó Sombra con entusiasmo.
Elena estuvo en silencio unos segundos, y luego se inclinó hacia delante como si quisiera decir algo en voz baja.
-No sé qué es lo último que recuerdas de Raven, pero te tengo buenas noticias.-
Notó que Sombra daba un suspiro, como de alivio. Cerró los ojos y agachó la cabeza.
-Cuando hablé con la gente de la prisión me informaron de algunas cosas. Raven resultó gravemente herida, pero se está recuperando... en el Hospital Central.-
-Gracias... gracias...-Murmuró Sombra mientras levantaba la vista.
-Por razones de seguridad es que no tienen permitido contactarse, así que esto es muy secreto.-Continuó Ele.
-¿Pero no puedo verla? ¿No puedes llevarme?-Preguntó Sombra, que empezaba a derramar lágrimas de emoción.
-En teoría estás en prisión, ¿recuerdas? Pero... puedo concederte eso. Entiendo que el dinero y la pena te importen poco, en esta situación es lógico...-Elena se levantó mientras hablaba, y Sombra la seguía con la mirada.
Caminó alrededor de la mesa, se acercó a la silla para proceder a remover las esposas de Sombra. Al mismo tiempo que lo hacía siguió hablando.
-Los guardias de la prisión intentaron derribar tus defensas, minar tu confianza, manipular tus recuerdos... es a lo que se dedican. Pero te mantuviste firme, no los dejaste.-

Sombra quedó liberada, pero se mantuvo inmóvil en la silla. Elena pasó a su lado y se dirigió hacia la puerta.
-No tengo problemas en concederte lo que pides, como parte de nuestros términos. Te necesito en Reshforce, y aceptaré tu condición de llevarte a visitar a Raven si nos ayudas.-Concluyó Ele.
Sombra hizo un gesto afirmativo. Quiso decir algo pero le tembló la voz. Elena le indicó que se levantara. Era momento de salir.

Cuando salieron al pasillo, empezaron a caminar pero de imprevisto Sombra intentó darle un abrazo a Ele. En una fracción de segundo dos hombres de negro la tomaron por los hombros y estuvieron a punto de derribarla al suelo, pero Elena les hizo un gesto para que no lo hagan.
-No se alteren, agentes.-Dijo con calma.-Acompáñenla hasta el cuarto de operaciones. Yo tengo que ocuparme de una cosa, iré en unos minutos.-
Los tipos trajeados acataron y soltaron a Sombra. Antes de alejarse, le hizo un saludo militar.
-Comandante.-
Ele le hizo un gesto afirmativo y luego bajó la mirada.

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Y bueno, el elenco sumará más gente. Ahí seguimos con esto xD

Hace unos días Spike me comentaba las cosas que detectó sobre algunos personajes xD cómo robé vilmente de algunas fuentes jaja sepan que hay más.

[Ill]

No sé por qué pero me imagino a mi personaje así, incluso con el tupé setentero xD

[Caleb]

Capítulo 6
En marcha

En el camino al cuarto de operaciones, Ele se desvió para meterse en un lavabo y tomarse unos minutos.
Se echó agua a la cara y dio unos pasos de un lado a otro. Empezaba a sentir la presión de la misión. No quería ni pensar en el hecho de tener que eliminar a sus propios compañeros en el final si la misión estaba siendo un éxito.
Puso empeño en tranquilizarse y salir. Iba a mantener la cabeza fría y ver qué tan lejos podía llegar.

Salió del lavabo y retomó su camino. El cuarto de operaciones estaba un par de pisos más arriba, por lo que siguió adelante.
Iba ensimismada sin prestarle atención a su alrededor, hasta que a no mucha distancia de su objetivo se cruzó con Rain Ocampo.
-Vaya, así que estás llegando tarde. Me informaron que todo está bien, los sujetos se prestaron a cooperar.-Dijo Rain.
-Sí, hubo que negociar un poco...-
-Después de esto tu leyenda crecerá aún más. Te estaremos esperando.-

Rain le dio una palmada y siguió su camino. Ele suspiró e hizo lo mismo. Ya estaba cerca.

El pasillo parecía eterno, pero allí estaban las puertas de acceso al cuarto de operaciones custodiadas por dos guardias de Langley. En este punto ya no había hombres de negro a la vista.
Ele ingresó y se encontró en el cuarto de operaciones: un salón de grandes dimensiones, con una pantalla donde se mostraba el informe, una mesa con algunas carpetas, y varios lockers con armas y municiones.

Allí estaba Point “Fury” Reflex con un traje ignífugo de color negro que le cubría todo el cuerpo. Su rostro ya no era visible por el casco de astronauta que estaba polarizado. Se había estado quejando por no tener su lanzallamas, así que terminó optando por un rifle de asalto M4 con lanzagranadas.
Jig tenía pantalones cargo color caqui, botas de combate, chaleco táctico y camisa arremangada. Sobre su cabeza llevaba un gorro de lana negro. Se lo veía serio y atento. Llevaba varios cuchillos consigo, y un par de pistolas.

Ill se encontraba un poco más lejos, con un G36A y su clásico uniforme de Reshforce con camuflaje urbano. Como siempre, una pistola de respaldo y su cuchillo personal.

Isra llevaba un saco azul a juego con su cabello y pantalones con camuflaje. En su mano izquierda portaba un guante con cuchillas, como una pequeña garra.
Con su otra mano sostenía su rifle personalizado, un M4 con mira telescópica, puntero láser y rayas de color rojo. Cada punto blanco marcado en el arma era una baja confirmada, y tenía muchos. Al menos aquello era lo que se veía, pero sabían que probablemente su arma también tenía modificaciones en sus mecanismos.
Se equipó también con una pistola y un par de granadas de humo.

Sombra tenía un equipo más blindado y un casco. Llevaba una escopeta Spas 12 y una mochila al hombro.

Se observaban entre todos pero no se decían mucho. Fury y Jig parecían estar más en sintonía, mientras que Isra seguía a su bola y Sombra se concentraba en elegir una pistola. Ill empezó a recorrer el cuarto lentamente, supervisándolos.

Ele sacó una llave de su bolsillo y fue hasta su propio locker. Sólo unos pocos tenían locker propio, y ella era de ese grupo.
Lo abrió, sacó un chaleco antibalas ligero y una gabardina negra; dejó su chaqueta de cuero allí y se puso encima las nuevas prendas.
Del locker tomó un rifle de asalto AUG, su pistola favorita Ruger 22 y su machete. Se colocó la funda con el machete a la cintura, y una vez que cerró el locker echándole llave se dirigió a los demás.

Pidió su atención y se ubicó de espaldas a la pantalla donde se veía un mapa satelital de la zona. Un sanatorio de grandes dimensiones situado cerca de un cerro, lejos de cualquier ciudad.
-¡Muy bien! Estamos a punto de partir, así que escuchen con atención. Nuestra misión es ingresar en este lugar, rescatar a dos científicos, destruir su investigación y salir. Se llaman Michael y Roxan Rivaille.-
La imagen de la pantalla cambió y se vieron los rostros de ambos hermanos.
-El gobierno conduce una investigación secreta ahí que debe ser destruida. Así que lo primero que haremos será localizar a los científicos. Con su ayuda iremos suprimiendo la investigación, y luego nos largamos. No hay forma de comunicarse con el exterior, sólo utilizando los aparatos que el gobierno tiene ahí. Así que tendremos que usarlos para contactar a nuestro helicóptero. ¿Alguna pregunta?-

Hubo silencio por unos segundos, hasta que Jig levantó la mano. Ele le dio la palabra.
-¿A qué nos enfrentamos? Digo, todo esto no debe ser sólo por una extracción...-
-No hay información suficiente. El gobierno cree que puede ser un ataque terrorista. Así que estén atentos.-
Nadie más preguntó nada por lo que Ele, percibiendo un poco de apatía, les hizo un gesto y la siguieron. A su lado iba Ill, y los demás caminaban atrás. Sombra y Fury iban delante, Jig e Isra cerraban el grupo.

Tomaron unas escaleras hasta el helipuerto que había en la terraza. Allí vieron un helicóptero negro listo para despegar, y varios hombres de negro.
Mientras todos abordaban el vehículo, uno de los agentes le tocó el hombro a Ele. Al darse vuelta, el tipo le tomó la mano derecha y simuló estrecharla, pero le dejó un pequeño papel.
-Buena suerte.-Dijo el agente.
-Gracias.-Contestó Elena, un poco extrañada.

Al subir se metió la mano en el bolsillo y escondió el papel disimuladamente. Los demás se encontraban listos, por lo que ella se acercó a la cabina y le dio las órdenes a los pilotos. Ellos estaban al tanto de la misión, así que sabían lo que tenían que hacer.

El helicóptero levantó vuelo y se alejó de Langley. La tarde gris se acercaba a su fin, mientras la expectativa crecía entre los nuevos miembros de Reshforce.
Ele se ubicó cerca de la cabina, y respiró hondo.

Ill la observaba desde el otro lado, hasta que Isra se pasó a su lado.
-¿Y cuál es tu historia?-Preguntó el tipo de cabello azul.
-No necesitas saber nada de mí. Sólo debes estar atento.-
-Vaya, sabes... percibo un clima de desconfianza. ¿Estoy equivocado?-
-Silencio, Isra.-
Mientras tanto Ele miraba al suelo. A su lado tenía a Jig cruzado de brazos y dormitando. Frente a ella, Sombra conversaba con Fury.
No sabían que iban a un destino muy cruel. Al principio no le había importado formar un equipo de reclusos prescindibles con poco y nada de experiencia militar, e incluso con un sujeto al que le guardaba bastante rencor. Pero poco a poco se iba llenando de dudas. Y esperaba que en algún momento cambiasen los parámetros de la misión.

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Actualización veloz! xDD

La próxima supongo que llegará en unos días, pero es que los que se vienen ya los tengo cubiertos jaja pero no se preocupen que llegará.

[Ele Alzerav]

Se va acercando la tensión
Si es que al final se les va cogiendo cariño a las criatura, por eso las dudas xDD

A ver qué pasa

[Caleb]

NOTICIA

Dado que recibí algunas preguntas sobre el estado de esto, quería pasar a contestar xD

Este fic se encuentra detenido de momento debido a una gran re-estructuración que está sufriendo. No es que quiera spoilear nada... eso lo haré más adelante xD pero muchas ideas y cosas de este fic han migrado a los mini-fics que estoy haciendo ahora.

Eso sin contar que esto arrancó con problemas desde el principio...

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Pero pasaré a terminarlo. Quizás no de la manera que estaba planeada en un principio, pero al menos para que no quede en el aire. Y una vez concluido les pasaré algunos detalles de todo lo que pasó con Reshforce xD