Ahora sí, ya estamos todos!
[center]El Asesino en Serie [Lost In Raccoon City][/center]
Noche 1
Ortigo corrió agachado hacia el bar para que los zombies no se percatasen de su presencia. Mientras Jmf lo esperaba en la puerta, entró por la ventana abierta sin que éste se diera cuenta.
Ortigosaurio - Eh! Te viene bien un poco de ayuda?
Jmf se dio la vuelta sobresaltado, la ventana estaba justo al lado, así que Ortigosaurio apareció muy cerca y se llevó un tablonazo en la cabeza, desplomándose al suelo.
Ortigosaurio - Joder, vengo a colaborar, sólo necesito algo para crear un cóctel molotov y quitar los zombies de la entrada de la comisaría, después me iré por donde he venido.
Jmf - La comisaría? Está bien, vista la situación parece necesario colaborar, iré contigo. Ya tenía un par de botellas de alcohol "tuneadas"
En la comisaría todos estaban bastante asustados, todavía discutían si debían salir de allí o no cuando el techo de la sala de espera se desplomo y sobre los escombros saltó una figura armada con un bazooka.
Nemesis - STAAAAAARRS!!
Berman - Corred!!
Jill emitió algunos disparos hacia la criatura, pero al ver que no le hacian ningún daño, abrió la puerta hacia el hall para que todos pudieran salir.
Jill - Salid por la puerta principal, rápido!!
Mientras Berman, Reynald, Roxanne y Carlos quitaban la barricada de la puerta, Jill y Chrisisra se habían quedado a intentar contener al monstruo.
Chrisisra - Intenta disparar al techo, quizá caigan algunos de esos cascotes encima de esa bestia!
Jill disparó pero sólo consiguió que le cayeran algunas piedras en la cabeza que no le hicieron trastabillar lo más mínimo.
Nemesis - STAAAARRS!
Levantó el bazooka apuntado a Jill que todavía estaba junto a la puerta, Chrisisra estaba al otro lado de la habitación, cuando cayeron los escombros quedó bloqueado junto al biombo del fondo.
Chrisisra - Va a dispararte, vamos corre con los demás!
Jill - Vas a quedar atrapado, ven hacia aquí!
Chrisisra - No puedo pasar! buscaré otro camino!
*booooom*
Nemesis disparó hacia la puerta por la que Jill ya había salido. Todo lo que quedó en lugar de la puerta, no eran más que escombros que tapaban la misma.
Roxanne - Dónde está el civil?
Jill movió la cabeza y al llegar a su altura, quitó de una patada la última madera que bloqueada la puerta.
*AAAAaaaarrrghhhhhh*
Se escuchó el grito de Chrisisra al otro lado de la puerta, pero antes de que pudieran pararse a pensar sobre ello, Jill procuró ponerlos a todos en marcha.
Jill - La puerta está abierta, vamos, vamos, vamos!
Fueron saliendo en orden y cuando Arovi pasó por delante de Jill, ésta le susurró unas palabras.
Jill - Gracias por venir, encontraremos un momento para hablar tranquilamente.
Arovi - Entendido.
Cuando salieron a la parte delantera de la comisaría, vieron varios cadáveres quemados, y bastantes focos de llamas que impedían el paso. El plan era llegar hasta el helipuerto porque ya no podían esperar más a las autoridades. No sabían si el resto de miembros de las Fuerzas Especiales seguían vivos o si los habían dado por muertos a ellos y habían evacuado ya a los supervivientes encontrados.
Era un recorrido complicado y había que atravesar buena parte de la ciudad, pero tenían que intentarlo, con ese bicho gigantesco persiguiéndolos, estarían muertos si permanecían quietos en un sólo lugar, por lo que atrincherarse no era la solución.
Jmf - Estupendo plan, ahora no podemos pasar.
Ortigosaurio y Jmf estaban al otro lado, las llamas habían elimiando a los zombies, pero habían cortado el paso hacia la entrada de la comisaría.
Ortigosaurio - Las llamas terminarán por disiparse, sólo espero que para ese entonces, no se haya vuelto a llenar todo de muertos vivientes.
Yaun y Kniffedu consiguieron llegar a la azotea, el grupo había pasado al siguiente edificio y habían dejado de dispararles desde arriab.
Yaun - Menos mal que hemos podido subir, ya me venía cayendo al callejón otra vez.
Kniffedu - Mira, van a retirar la pasarela, tenemos que hacer que nos vean y se den cuenta de que estemos vivos, tienen que esperarnos!
Yaun y Kniffedu se acercaron a la cornisa y empezaron a saltar y agitar los brazos para que los demás los vieran. Los muertos no hacen esas cosas, con lo que rápidamente cayeron en la cuenta de su error y los ayudaron a pasar.
Oddro - Casi nos cargamos a dos supervivientes, menos mal que tenemos mala puntería.
Kevin - Sólo estaba intentado disuadirlos...
Kevin refunfuñó pero en el fondo se alegraba de que estuviesen vivos, sabían de lo que era capaz Umbrella y ver zombies con esas habilidades motoras sin duda empeoraba la situación mucho más.
Ill - Al otro lado del edificio la calle está bastante despejada, de hecho hay varios supervivientes frente a la comisaría.
Cindy - Seguro que son supervivientes?
Ill - Sí, la entrada está cubierta de llamas y hay dos tipos fuera y al menos otras 10 personas en la puerta de la comisaría.
Mark - Quizá por aquí haya alguna manguera con la que podamos sofocar las llamas.
Caleb Kendo - Inspeccionaré la zona mientras pasan por la pasarela.
Yaun y Kniffedu se reunieron con todos y retiraron la pasarela para evitar problemas. Por su parte, David y Caleb Kendo consiguieron encontrar una salida de agua en la azotea y que además funcionaba. No había manguera, pero eso no fue un problema para David, que consiguió idea un artilugio con alunas tuberías, que de paso tenía una salida más ancha, imprescindible para apagar el fuego.
Todos los que estaban abajo se sorprendieron al ver el agua proveniente de la azotea del edificio, aunque a todos les sirvió para sus propósitos. Los que querían entrar a la comisaría tenían el camino libre, así como los que querían salir.
Kevin y los demás bajaron y se reunieron todos, lamentablemente no había tiempo para explicaciones.
Jill - Hay algo ahí dentro que nos matará a todos con sólo pestañear, tenemos que salir de aquí.
Kevin - Algo como qué??
Carlos - No importa, tenemos que llegar al helipuerto, todos detrás de nosotros caminando agachados y siempre cubiertos por algo.
Iban a comenzar a caminar ordenadamente cuando un disparo de bazooka salió de dentro de la comisaría.
Nemesis - STAAAARRSS!!
La mayoría consiguieron apartarse, pero algunos de los supervivientes que venían de la comisaría estallaron en pedazos. Algunos coches patrulla que había en la entrada explotaron inundándolo todo de nuevo de llamas. Se había levantado una barrera visual entre ellos y Némesis, pero no era difícil imaginar que iba a conseguir atravesar las llamas fácilmente.
Jill - Ahora, corred hacia ese callejón!
No había ni tiempo ni ganas para preguntas, así que antes de que la calle se llenara de los zombies que habían sido atraídos por el ruido, escaparon por un pequeño callejón para salir del radio de visión de la bestia y poder poner terreno de por medio.
En el callejón había bastantes zombies y al fondo alguien había levantado una barricada con unos barriles y una red metálica, para bloquear la calle de al lado. Corrieron esquivándolos como podían y conforme iban llegando trataban de saltar al otro lado.
Yaun - Rápido, nos están siguiendo!
Reynald - Saltad sin mirar atrás, son lentos, no hay que preocuparse.
Yaun se quedó atrás tras asestar un golpe con su espada de madera a un zombie. La cabeza del zombie rodó por el suelo pero su espada se enganchó, y mientras conseguía sacarla, ya estaban todos a la altura de la barricada.
Corrió hacia allí esquivando los zombies que quedaban por el camino y cuando comenzó a escalar los barriles, uno de los zombies le agarró por el pie. Intentó sacudirselo con todas sus fuerzas y cuando lo consiguió el zombie intentó echar mano del resto de los que todavía no terminaban de escalar. Yaun volvió a ponerse en marcha para escalar, pero no reparó entre el tumulto de personas pasando al otro lado, que un pie le golpeó y cayó justo encima del zombie que estaba intentando ver lo que pillaba. Todos terminaron de saltar y Yaun quedó al otro lado siendo devorado por el zombie que por fin había logrado su propósito.
Mark - Espera! nos falta uno!
*Aaaaaaa
rrrrgghhhhh*
De nuevo un grito inundaba Raccoon City. Con un superviviente menos, pero el grupo había llegado al otro lado.
Siguieron su camino agachados entre los coches, cuando se encontraron con alguien que salía de una gasolinera.
Rein - A dónde vais? Pensaba que la comisaría estaba en la otra dirección.
Jill - Vamos hacia el Helipuerto, la ciudad está tomada.
Kevin - Ven con nosotros, ahí fuera no hay nada seguro.
David - Quizá sea buena idea llenar más bidones como el que lleva ella, las explosiones que pueden provocar pueden sacarnos de más de un lío.
Se armaron como pudieron con algunos bidones, pero cuando se disponían a salir de allí, no se percataron de que el encargado de la gasolinera los había estado observando y se hizo ver apuntándolos con una escopeta. Tenía un brazo vendado, probablemente había sido mordido porque no tenía muy buen color.
Encargado - Vais listos si creéis que me vais a robar.
Reynald - Somos efectivos de las Fuerzas Especiales custodiando civiles para ponerlos a salvo, es una emergencia. El Estado cubrirá los gastos. Venga con nosotros y le pondremos a salvo.
Encargado - Y una mierda, el Estado no sabe más que meternos en problemas. Protegeré mi gasolinera y volaré en pedazos a todo el que se acerque.
El encargado de la gasolinera no quería entrar en razón, por lo que algunos de ellos pensaron que era mejor reducirle. Rein era la que se encontraba más cerca, con un rápido intercambio de miradas, alguien le hizo una señal para que golpeara al encargado y pudiesen hacerse con al escopeta. Ella levantó el bidón de gasolina que llevaba en las manos y de un golpe rápido le dio en la cabeza. El encargado cayó sobre ella y su arma se disparó, rozándole el hombro.
Rein - Mierda! como duele joder!
Kevin - Cuidado! No dejes que te muerda!
Rein se quitó de encima al tipo, que todavía se convulsionaba por el golpe recibido. Mientras Kevin, Mark y Reynald redujeron al sujeto y le quitaron el arma, los demás entraron a la tienda de la gasolinera a por alcohol y unas vendas para la herida de Rein que no dejaba de sangrar y además aprovisionarse con cualquier cosa que pudisese resultarles útil.
El golpe en la cabeza terminó siendo mortal para el encargado de la gasolinera, así que ahora podían llevarse lo que quisieran sin problemas.
Eran muchos para disperarse en vehículos, pero en la parte trasera, había una furgoneta que podía ayudarlos a seguir avanzando...
[/b]
Primera noche de bajas en Raccoon City otra vez comenzamos con una pequeña carnicería xD
Yaun e Isra pasad a enseñar vuestras cartas, y los demás, segunda ronda de votaciones!