[center]El Asesino en Serie [Watchmen Style][/center]
Noche 1
Diario de Rorschach, 13 de Octubre de 1985
Manhattan está completamente fuera de la realidad y yo no puedo hacer nada para traerle de vuelta.
Si Espectro de Seda no lo consigue, no seré yo quien se arriesgue a ser teletransportado a otro planeta de una galaxia lejana.
La inesperada reaparición del Comediante me reclama, no puedo perder más tiempo con el hombre indestructible. Necesito información y debo encontrar alguien que me la proporcione.
Rorschach - Qué sabes del nuevo Comediante?
Rotten - Poco, asegura ser Blake, y no hay duda de que Blake murió. Está claro que algo oculta y no descarto que tenga relación con los asesinatos de superhéroes jubilados.
Rorschach - Creo que la siguiente parada es Ozymandias. Él conoce las identidades de la mayoría de los Watchmen, quizá podamos descubrir quién se está haciendo pasar por Blake.
Ozymandias se alejó de todo ese mundo al desvelar su identidad y dedicarse por completo a ser un hombre de negocios. No iba a ser fácil hablar con él o conseguir que diera información sin ningún motivo. La madrugada caía sobre Nueva York, y para dos seres nocturnos acostumbrados a deslizarse entre las sombras, nada mejor que una primera inspección furtiva a las instalaciones del ex Watchmen.
A través de bloques de departamentos medio derruidos, llegaron a la azotea del edificio de Ozymandias y descedieron hacia los niveles inferiores donde se encontraba el laboratorio. Estaba todo desierto, en una ciudad con una vida noctura tan prolífica, un sitio como aquel parecía muerto, aunque eso no quería decir que no tuviese nada que mostrar. La seguridad en el lugar era bastante complicada de burlar. Cuando entraron al laboratorio les sorprendió ver a un científico trabajando profusamente tras los vidrios de seguridad.
Alexkemp - Tengo que terminar esto rápido, mientras el futuro de Manhattan esté bloqueado hay tiempo, pero eso no sucederá eternamente.
Estaba tan atareado que no se percató de la presencia de sus dos pequeños espías. Estaba fabricando una especie de artefacto nuclear. Mientras colocaba piezas y rellenaba compartimentos con líquidos extraños, debió mezclar algo inadecuado y una explosión lo sacó de su concentración. Rotten y Rorschach fueron arrastrados varios metros y pudieron esconderse antes de ser vistos.
Alexkemp - Mierda! Eso me hará tener que empezar de nuevo el proceso de activación. Espero que esta noche no haya nadie en apuros...
Alexkemp se quitó lo que parecía una bata anti-radiación que había amortiguado en gran medida el impacto y tras tirarla a un contenedor con el símbolo nuclear, se puso otra.
Rorschach - Manhattan? De qué hablaba?
Rotten - Desaparezcamos de aquí.
Azrael escuchó la explosión mientras vigilaba la ciudad y reconoció rápidamente que se trataba del lugar que había visitado anteriormente. Se acercó con su motocicleta y vio como dos sombras se deslizaban fuera de allí y huían a través de los callejones. La explosión no había afectado a la estructura y no podía ver mucho más. Arrancó su moto para irse, pero aunque ésta funcionaba correctamente, no se movía.
Kaleb - Creo que aquí tenemos a alguien nuevo en la ciudad.
Ortigo - Parece que necesita orientación.
Azrael se dio cuenta de que no podía avanzar porque estaban interviniendo en su vehículo. No les gustaban los superhombres pero tampoco tenía mucho que perder, ya que Ozymandias había rechazado su colaboración, al fin y al cabo, necesitaba contactos para averiguar qué estaba pasando con los Watchmen. Era más fácil investigar algo desde dentro.
Azrael - Efectivamente, soy nuevo en la ciudad. He escuchado la explosión y me he acercado a ver. Parece que lo tienen controlado.
Kaleb - Qué te trae por aquí?
Azrael - Vine a pedir trabajo en la empresa de Ozymandias, tengo algunos estudios sobre artes y humanidades. Lamentablemente no tengo donde pasar la noche, así que soy un espectro que vaga por ahí, como vosotros.
Ortigo - Has dado con la compañía adecuada, vamos, es peligroso estar por aquí.
Kaleb - Ortigo, acompáñale a la fábrica, yo iré a la reunión que teníamos pendiente.
La noticia de la reaparición del Comediante llegó también al centro Rockefeller, donde el Dr Manhattan comenzaba a despertar de su letargo mostrando interés.
Ill - Puedes ver algo sobre el nuevo Comediante?
Dr Manhattan - Mi futuro sigue difuso. No puedo decirte nada sobre eso, sin embargo, está comenzando a inquietarme.
Ill - Puede que no veas si se llega a desvelar a su asesino o la identidad del nuevo Comediante. Pero quizá veas algo que vaya a suceder esta misma noche y yo pueda ir a investigar.
Dr Manhattan - Muchos ataques, asesinatos, robos y violaciones suceden cada noche en Nueva York, por qué una de ellas estaría relacionada con el Comediante?
Ill - Ayer detuvo a un secuestrador, esta noche quizá salve a otros y yo puedo seguirle sin que me vea, sólo tengo que localizarle.
Dr Manhattan - También puedes hacerlo volar en pedazos. No soy el único que tiene ese poder.
Ill - Hay que arriesgarse, no estoy dispuesto a que me maten a mi también.
Dr Manhattan - Esta noche habrá un ataque cerca de Central Park. No puedo ver la hora exacta, pero no queda mucho.
Antes de que terminase de hablar, Ill ya había partido hacia allí a investigar.
Kniffedu caminaba distraído por las inmediaciones del Central Park. Lo que le había dicho la camarera le había dejado pensando. "Ellos te encontrarán a ti". Por mucho que se paseaba por la ciudad en plena noche, no pasaba nada. Estaba a punto de rendirse e irse a dormir, cuando un desconodico le saltó encima. Estaba ataviado con un uniforme de vaquero, un sombrero calado hasta los ojos y dos revólveres que pensaba hacía años que no existían. El desconocido lo derribó de una patada y lo apuntaba con una pistola.
Justiciero - He oído que has atacado a una jovencita esta tarde, pagarás por ello!
Kniffedu - Yo no la ataque! Sólo presencié como otro la atacaba, pero sabía defenderse sola! Quién coño eres tú?
Justiciero - Yo soy el Justiciero! No has oído hablar de los Watchmen?
Kniffedu - Maldita ciudad, es peor de lo que recordaba. Escucha, no quiero problemas, yo no he hecho nada, así que me levantaré y me iré.
Kniffedu se levantó y empezó a caminar despacio hacia atrás mientras se sacudía la tierra de los pantalones ante la atónita mirada del Justiciero. No le iba a dejar escapar tan fácilmente así que disparó en repetidas ocasiones. Kniffedu sacó sus armas blancas y las utilizó como escudo para las balas. No pudo evitar que una de ellas impactara le impactara en el brazo y cayese de nuevo al suelo. Estaba a merced del Justiciero de no ser porque entró en juego un tercer enmascarado. Un hombre ataviado con una pijama blanco y con la cara tapada por una mascarilla derribó por la espalda al Justiciero con una sierra metálica.
Desde luego, al despertarse por la mañana no iba a saber distinguir si todo aquello habría sido un sueño.
Ill presenció la extraña batalla y no podía dejar de pensar que parecía haber más Watchmen activos de lo que había pensado en un principio. Quizá era hora de buscar quién le ayudara a controlar su poder y entrar en el juego.
Kaleb llegó al lugar de su reunión con el hombre radiactivo. Un pequeño callejón en la parte trasera de un club de streaptease.
Kaleb - No eres muy discreto para elegir lugares.
Chrisisra - Ya que estoy aprovecho el viaje.
Kaleb - Pudiste sacarle algo a la chica?
Chrisisra - No creo que sepa nada, o por lo menos nada que nos interese. Tiene muchos contactos y seguro que mucha información, pero sobre el exterminio de los Watchmen, su hermano es la clave.
Kaleb - Su hermano casi no puede moverse.
Chrisisra - Los militares pueden conocer los planes del gobierno a la perfección, son sus ejecutores. Nadie más interesado que ellos en que desaparezcamos y en neutralizar a Manhattan.
Kaleb - Quizá tengas razón, habrá que pensar en algo. Sólo podremos acceder a él a través de su hermana.
Como cada noche Roxanne había salido a buscar algunas medicinas para su hermano y de camino, realizar algunos "encargos". Desde hacía tiempo, utilizaba sus ingenios para robar en pequeñas joyerías sin ser vista, y con eso sacaba un buen sobresueldo que les permitía vivir bien y además, conseguir material para seguir con sus inventos. Aprovechó para investigar la joyería en la que se había visto al nuevo Comediante en busca de alguna pista. No vio mucho más que los cordones policiales y cristales rotos. Sin embargo, su linterna de luz ultravioleta le permitió extraer alguna que otra huella dactilar que podrá examinar mejor más tarde.
Mientras su hermano dormía, podía tomarse todo el tiempo que quisiera, así que se acercó también a investigar la explosión del edificio de Ozymandias. Casi estaba amaneciendo cuando paró a comprar algo para comer a un vendedor de perritos calientes.
Nadie - Una mala noche eh?
Roxanne - No hace falta que lo jure.
Nadie - A mi casi me matan unos bándalos, desde que no están por aquí los Watchmen, la ciudad es mucho más insegura. Deberían volver.
Roxanne - Sí...
Nadie - Que tenga un buen día y cuide bien a su hermano.
El vendedor le guiñó un ojo y Roxanne se alejó pensando cómo sabía quién era mientras mordía su perrito caliente.
Roxanne - No te vas a creer lo que me ha pasado...
Dijo Roxanne mientras dejaba las llaves de casa en el recibidor. Miró a la habitación esperando encontrarle todavía en la cama, no podía levantarse sin ayuda, pero no estaba allí.
Roxanne - Dónde estás?
Michael - Estoy aquí!
Michael estaba sentado en un sillón en la terraza.
Roxanne - Cómo has llegado hasta ahí?
Michael - Con cuidado. Esto... qué te ha pasado?
Roxanne - Ehm... nada, era una tontería.
Roxanne se dispuso a prepararle algo de desayunar a su hermano mientras ordenaba sus pastillas en el pastillero. Michael sabía que tenía que tener cuidado, su hermana no podía saber que salía durante la noche. No le gustaba fingir que no podía moverse, pero alguien tenía que atrapar a ese ladrón de joyas, y si su hermana se enteraba de que era un Watchmen, empezaría a preocuparse con todo lo que estaba sucediendo.
Y una vez más no atináis a matar a nadie en la primera noche xD
Nueva ronda de votaciones a ver si hay más "suerte" para la próxima
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